
En Maryland, Estados Unidos, un bebé de tan solo cuatro meses de edad fue diagnosticado con un tumor cerebral, que tenía la particularidad de contener varios dientes totalmente formados.
la rápidez del crecimiento de la cabeza del bebé llamó la atención de los médicos quienes comenzaron a sospechar que algo andaba mal. Luego de una resonancia magnética pudieron confirmar que el lactante tenía un tumor cerca de la hipófisis, y que en su interior, existían piezas dentales muy similares a las que existen en la mandíbula interior de los humanos.
El periódico The Daily Mail, afirmó que el diagnóstico médico arrojó que el tumor – que ya fue extirpado – se originó desde la Bolsa de Rathke, precursor embrionario de una parte de la hipófisis. Aunque los tumores suelen estar llenos de un líquido viscoso amarillento, nunca se había documentado un caso con piezas dentales.
A pesar de remover el tumor, el menor deberá someterse regularmente a intervernciones para evitar que esté se pueda expandir.